Según mediciones privadas, 2018 se encamina a ser el año con mayor pérdida de poder adquisitivo de los trabajadores desde 2002. Y si hay dos actores que lo saben bien son las familias y los comerciantes.
Un informe de la consultora Focus Market , de Damián Di Pace, hecho a través de scanntech, asegura que en octubre el consumo cayó 3,1% interanual, y en lo que va del año ya acumula una caída de 2,8%, según lo consignó ámbito.com en una nota publicada ayer.
Además, la caída tiene otro ingrediente que evidencia la falta de dinero en el bolsillo de la gente. Según el relevamiento se realizan más compras chicas y más frecuentes. El promedio por cada compra es de 4,38 productos, y es la serie histórica más baja que se haya registrado desde 2002.
Asimismo, el trabajo de Focus Market remarca que la inflación interanual entre octubre-octubre es de 44,6% y que esto derivó en que “ya hay familias que están en niveles del 50% de incremento de precios” en productos de su canasta básica.
Del lado de los comerciantes, la facturación no acompaña a la inflación. En octubre las ventas fueron 40,1% mayores que un año antes, por lo que quedaron casi cuatro puntos porcentuales por debajo de la suba de precios. En tanto que en el acumulado ocurrió algo similar: los precios subieron 26,7% y la facturación solo 22,5%.
Sobre el tipo de productos que consumen las familias, los rubros minoristas donde más se resintió el consumo fue en artículos como cuidado del calzado (-19,3%), congelados (-16,7%), cosmética (-11,9%), y lácteos (-11,7%).